Fijar el precio de venta de un inmueble es una cuestión delicada. Si te pasas y fijas un precio demasiado alto, corres el riesgo de que la propiedad tarde mucho en venderse.
La tasación de la propiedad es un paso clave dentro del proceso de venta. Uno de los primeros y más críticos, y por ello nuestro consejo es siempre solicitar asesoramiento con -al menos- un experto.
El agente inmobiliario, además de la tasación, se encargará de dos procesos imprescindibles para obtener un precio de venta adecuado:
– Realizará un análisis objetivo y profesional del mercado.
– Estudiará el estado de la oferta y la demanda existente en la zona al momento de vender.
Estos dos procesos, junto a la tasación, completan los factores mínimos que necesitas para evitar desajustes al decidir el valor de venta del inmueble.
Al negociar el precio de venta de una vivienda, los compradores en España consiguen una rebaja media del 9%. Aunque existen máximos superiores al 20% en ciudades como Málaga y Vitoria-Gasteiz.
Es muy común que los vínculos emocionales que nos unen con nuestra propiedad, nos influyan y nos lleven a sobreestimar su valor al momento de ponerla a la venta.
Por eso, contar con un asesoramiento leal y profesional desde el minuto 1 nos llevará en última instancia a realizar una transacción mas lucrativa y menos estresante para todas las partes.
